¿Sabías que la fiebre en los niños consiste en un mecanismo contra una infección que no siempre debe ser tratado?
Según expertos la fiebre en la edad infantil no tiene por qué estar relacionada con una enfermedad grave. Sin embargo se trata del motivo mas numeroso por el cual muchos padres acuden a las urgencias pediátricas.
Con mayor presencia durante los tres primeros años de vida su aparición es determinante para fortalecer el sistema inmunológico del niño. En este sentido los pediatras apuntan que el hecho de administrar un tratamiento al niño no siempre es necesario ya que dependerá de que tipo de síntomas presente el niño. En el 90% de los casos el motivo de la fiebre infantil es por infecciones víricas.
A falta de un cuadro en el que el niño rechace el alimento en el que hay ausencia de malestar se considera innecesario aplicar un tratamiento. Sin embargo ante una fiebre muy alta, no se encuentre causa alguna que lo justifique, se trate de un niño de menos de 3 meses de edad o presente síntomas del tipo irritabilidad, somnolencia, lesiones cutáneas o dificultad respiratoria, siempre se deberá acudir a un médico para su reconocimiento y diagnóstico.
A pesar de la información y recomendaciones por parte de los expertos, los servicios de urgencia siguen colapsándose por casos de fiebre infantil.
Se considera como temperatura normal hasta 36,5ºC, en el caso de tratarse de una temperatura de entre 37 y 38ºC se consideraría febrícula y a partir de 38ºC estaríamos hablando de un cuadro de fiebre.
En definitiva la fiebre en edad infantil en la mayoría de los casos se trata sólo de un síntoma de un proceso benigno que no debe alertar en exceso a los padres siempre estando alerta de síntomas que puedan manifestar un cuadro de gravedad fuera de lo que se considera normal.