¿Sabías que el bruxismo generalmente es un hábito inconsciente que produce síntomas que a veces no vinculamos con problemas dentales?

El rechinado o apretado de los dientes, habitualmente de manera inconsciente, se conoce como bruxismo. Esta acción se puede producir tanto por el día como por la noche provocando daños tanto en las piezas dentales como en la estructura ósea que los soporta.

Un síntoma frecuente que se puede ver con facilidad visualmente es el excesivo desgaste de las piezas dentales llegando a reducir su longitud de una manera exagerada, producido por el desgaste del esmalte que recubre el diente dejando la dentina al descubierto lo cual puede provocar desde excesiva sensibilidad a la hora de ingerir alimentos muy fríos o calientes.

Otro de los síntomas más frecuentes es el debilitamiento de las encías, llegando a provocar inflamación y retracción gingival desencadenando una gingivitis que producirá un sangrado propio de esta patología bucal.

A parte de estos síntomas visibles, el bruxismo produce otra sintomatología que en muchas ocasiones no vinculamos a esta patología bucal. El dolor facial concentrado en la mandíbula, oídos o dolor de cabeza habitual puede estar directamente relacionado con el bruxismo. Un persistente dolor en el cuello también puede estar provocado por esta dolencia. Esta serie de síntomas en la mayoría de ocasiones son tratados por otro tipo de origen más muscular o de otra índole y este es en la mayoría de casos en motivo por el cual se puede llegar a un estado de deterioro dental muy alto ya que en muchas ocasiones el diagnóstico llega en un punto muy avanzado de esta dolencia.

Con un correcto examen bucal se puede determinar la causa exacta del problema para poder aplicar un tratamiento para mejorar y prevenir. Generalmente el uso de una férula bucal a la hora de dormir mejora notablemente los efectos que produce el bruxismo en nuestra salud dental aunque en muchas ocasiones el factor estrés es determinante para mejorar ya que la tensión que este factor genera en la mandíbula repercute de manera directa.

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